ACTIVIDADES
EL FINAL
Otro día el viejo señor oyó una voz que decía:
- ¡Ayuda, ayuda!. El señor corrió hacia la voz. Era una señora a la que se le había desmallado el marido. El señor llamó a una ambulancia. La señora desesperada echo a
llorar. A los 5 minutos llegó la ambulancia y no tardó mas de 11 segundos en montar al viejo señor. Los médicos le
dijeron a la señora.
Vamos, te llevaré a casa. Al día siguiente la señora visitó a su marido el cuál estaba ingresado. El médico le dijo a la señora: - No se preocupe mañana le daremos el alta. Al siguiente día llamaron a la puerta. Al abrir la puerta vio que había una cesta de comida. En ella había una nota que decía:
Gracias señor, sin usted no lo hubiéramos superado este bache en la vida mi marido y mio. Estamos muy agradecidos con usted.
maestro me encanta el blog
ResponderEliminarola maestro me a encantado el archibador
ResponderEliminarEl viejo siguió ayudando a las personas, hasta que enfermó y murió. La gente pensó que debían hacer algo para recordarlo. Así que todavía se está pensando en hacer algo grande para las personas que tienen un corazón enorme. Se han propuesto muchas ideas como darle su nombre a un país, aunque lo malo de esta idea es que nadie sabía su nombre.
ResponderEliminarCoria del Río, 22 de marzo de 2010:
ResponderEliminarFinal del cuento voces nocturnas :
El mayor señor llevaba así casi un año ,escuchando unos terribles llantos todas las noches. Ya una noche ,casi invadido por la locura de no dormir, el señor oyó un sonido un poco extraño :No llegaba a ser un grito de desesperación ,pero era más intenso que que un simple llanto ; el señor se preocupo , en casi todo el año que llevaba escuchando llantos no había oído nada igual. El señor lo siguió como nunca había seguido un lamento .Corrió todo lo que pudo pero ,entonces ,ante sus ojos iba a suceder un accidente. Un señor en sillas de ruedas fue tirado a posta por un grupo de niños mal criados a una vía de tren .El señor se alarmó y cuando quiso ir a salvarlo el tren paso y él tuvo que quedar en silla de ruedas .A la noche siguiente ,el pobre hombre no oyó nada.<¿Es que ya no sirvo para esto?>Pensaba el pobre hombre, pero ,a la noche siguiente el hombre al que salvó llamó a su puerta ¡Ya no estaba en silla de ruedas! El viejo señor lo invito a pasar y le ofreció un té ,aunque fuera de noche .El hombre solo lo llamó para darle las gracias y para decirle que ya no oiría más llantos ni lamentos :Porque él se ocupo de todas las personas que estaban en la calle,porque tubo la suerte de que el señor que salvó era millonario, y de que él mismo se ocupó de parar la guerra. El viejo señor sonrió y pregunto que cómo sabía el que podía escuchar llantos por la noche,entonces el señor millonario le explico que el también escuchaba llantos pero ,que no como el ,no le echaba cuenta ;pasaba de aquellas personas asta que fue él el que estaba sufriendo;entonces el viejo señor lo agarró de la mano y dijo:.A partir de esa noche solo escuchaba las risas y no los llantos ,pero aveces él mismo lloraba porque ,quisiera él o no ,siempre habría llorando alguien porque es imposible que un hombre acabara con la infelicidad del mundo.
Fin
maestro eres el mejor maestro del mundo oeeeeeeeeeeeeeee
ResponderEliminarAl final el viejo señor buscó durante un tiempo a su familia y la encontró. Se fueron a otro país y se quedaron en el campo a vivir.
ResponderEliminarAl cabo del tiempo el viejo señor se olvidó de las voces nocturnas y vivió la vida tranquilamente y feliz.
FINAL CUENTO LENGUA
ResponderEliminarEl pobre hombre como tenia que ir a ayudar a las personas se acostaba muy tarde
entonces lo despidieron del trabajo pero como había ayudado a tantas personas y
las había sacado de tantos apuros fuerón y le dieron un trabajo fijo en una
empresa de ayuda a los pobres y desdichados
Cada noche pasaba y no podía dormir. Entonces decidió una tarde ser un guarda nocturno del museo de su pueblo ,así tendría que dormir de día y no escucharía mas esas voces nocturnas que le hacía no dormir tranquilo.
ResponderEliminarBY:Ana Rubio Casado
El señor siguió escuchando las voces asta que se hizo mayor y cayo enfermo y murió el otro hombre en su memoria iba todas las noches buscando las voces que el señor le había dicho que escuchaba hasta que un día el hombre murió y ya no volvieron a escucharlas nunca mas.
ResponderEliminarCuarto final:)
ResponderEliminarUna noche el viejo señor se encontró de nuevo al viejo de los andrajos. Se lo encontró en la iglesia y tenia las manos frías y el viejo señor tenía unos guantes y se lo dio. Le dijo gracias y le dio pena,le dio comida ropa y así no lloró nunca el viejo de los andrajos al final era un sueño de mentira¡pero fue divertido!
CUARTO FINAL
ResponderEliminarUn día se puso unos cascos de musica cada vez que se iba a dormir ponía musica relajante entonces pudo dormir todas las noches tranquilo nunca más volvió a escuchar llorar a nadie.
CUARTO FINAL
ResponderEliminarUn día fueron a buscar al viejo señor y le querían dar una sorpresa pero en ese preciso momento vinieron unos ladrones lo secuestraron. Tuvieron que llamar a la policía. La policía tubo que investigar quienes fueron por que nadie vio a quién lo secuestró.
Pasaron varias semanas y el viejo señor seguía sin aparecer. Hasta que un día mandaron un anónimo ese anónimo decía :
-por favor hacer todo lo que os digan y a parte mandad ese dinero que os piden.
Los familiares mandaron ese dinero que les pidieron y hicieron todo lo que les dijo. Y ya pudieron rescatar al viejo señor. A los ladrones lo metieron en la cárcel y al pobre viejo señor ya le pudieron hacer aquella sorpresa que tanto deseaban, por ser tan buena persona y socorrer a todas las voces nocturnas que pedían su ayuda.
final del cuento
ResponderEliminarEl hombre se puso los tapones en el oído,pero seguía escuchando las voces nocturnas que no le dejaban dormir. Entonces se fue a Australia para no oir las voces ,pero seguia escuchando y nunca mas pudo dormir.
Cuarto final:
ResponderEliminarUna noche,el viejo señor oyó otro llanto y lo siguió,como solía hacer y al llegar al lugar de donde provenía,dejó de oir el llanto y vió que había otro hombre ,algo más jóven que él,curando a un niño herido.Aquel hombre le preguntó que hacía allí y el viejo señor le respondió que llegó siguiendo un llanto y le contó su historia.
-No puede ser,a mi me pasa lo mismo-le contestó-compartimos el mismo poder.
-Prodriamos unirnos para ayudar a la gente que llora.
-Sí,me parece una buenísima idea.
A partir de ese día,empezaron a trabajar juntos todas las noches y encontraron a más gente que poseía los mismos poders que ellos y al final formaron una gran ONG para ayudar a toda la gente que llora en cualquier lugar del planeta.
Juan Luis de la Fuente Reina
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